Vía revolucionaria (traducción literal del título Revolutionary Road)  es aquella calle donde los Wheeler, un matrimonio norteamericano de  clase media, encuentran la casa en la que instalarse y formar su  hogar.
Frank  y April, la pareja protagonista, parecen tener la vida perfecta. Él  tiene un buen trabajo en la ciudad y ella, además de una gran belleza,  es una buena madre y ama de casa. Pero detrás de tanta perfección se  esconden dos seres poco realizados que buscan un ideal inalcanzable en  una tierra llamada “de las oportunidades”.
El  primer desengaño para los Wheeler: un barrio que no soportan, plagado  de amigos y vecinos corrientes. Ellos se creen y se ven como dos seres  superiores e inteligentes, alejados de la mediocridad que les rodea. 
Norteamérica  es su segundo desengaño. El sueño americano no puede llevarse a cabo en  una tierra dúctil, de masas, de traiciones, de cazas de brujas, de  mentiras. La vía para escapar de esa casa en Revolutionary Road, en un  suburbio de Connecticut, es buscar refugio en París: un lugar donde  empezar de nuevo, con otro estilo de vida.  
Pero  su principal desengaño: ellos mismos. Los problemas de comunicación  entre ambos van en aumento. La pretenciosa April sueña con una vida en  París bohemia y sibarita mientras que Frank se llena de inseguridades  ante las ambiciosas expectativas de su esposa. 
La  crisis en la pareja a cada página se hace más patente. Desengañados el  uno del otro, el plan se va al traste cuando Frank, un ser cobarde y  nada honesto, ante las adversidades que se les presentan, convence a su  esposa de la imposibilidad de continuar hacia delante. 
La  vida interior de estos dos personajes, radiografiada maravillosamente  por Richard Yates, nos descubre la complejidad de las relaciones  humanas, sus miedos y la capacidad de hacer daño a las personas que más  queremos.
Con  esta novela, Yates consiguió ser finalistas del National Book Award.  Este autor norteamericano, ya fallecido, ha sabido plasmar como nadie  los desengaños de la vida, tan humanos y tristes que a todos nos  alcanzan en un momento u otro de nuestra existencia. 
 
 

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