sábado, 29 de septiembre de 2012

ADIOS ESTRES


Vida fácil. Prender una vela, una corta siesta, una tarde sin hijos, una escapada al cine en pareja o un excéntrico masaje, todo puede ayudar a combatir las presiones. Sólo hay que hacerse el tiempo, y ni siquiera se necesita plata.

El paradigma del colapso: una mujer está en la oficina solucionando un problema económico de la empresa. Mientras, habla por teléfono con su hijo y lo consuela porque se pegó en la rodilla y no deja de llorar. Paralelamente arma la lista del supermercado para la comida de la noche y repasa mentalmente su clóset para decidir qué se pondrá al día siguiente. ¡Uf! ¡Estrés a la vena!

Calma. Un simple cafecito o una breve caminata alrededor de la oficina bastan para no perder el control. Así lo explica el siquiatra y académico de la Universidad Andrés Bello Carlos Cruz, quien aclara que el estrés es “una reacción de adaptación frente a un peligro”.


Lo importante es buscar una pausa y determinar “cuánto está dispuesta una mujer a invertir en tiempo y en dinero para que un relajo no traiga más problemas. Allí la clave es hacer un balance certero”, dice. Y, claro, mirar en positivo, ya que salir a trotar o compartir con amigos desestresa. Y no afecta tanto el bolsillo.


Aquí van algunos consejos para relajarse en los comienzos de la primavera.



Saber parar.

La mujer del nuevo milenio, se sabe, es “multifuncional”, explica Verónica Silva, sanadora del centro Ramdas Rai (www.ramdasrai.cl). “Hoy cumplimos muchos más roles que los hombres y entendemos que es necesario buscar la manera de centrarnos, reconocernos y sanarnos para poder afrontar la vida de una manera más feliz”.
Una forma de buscar ese equilibrio es hacer una pausa en cualquier área. “Hacer un alto es muy bueno. Con cosas mínimas puedo mejorar el día. Primero la adrenalina disminuye, baja el nivel de alerta y aumenta la sensación de control”, propone el siquiatra Carlos Cruz.De esto, dice el doctor, saben los japoneses, pues en el trabajo hacen pausas cada 45 minutos o una hora para hacer un poco de ejercicio. “Es un rasgo cultural que en Chile está comenzando con quienes van al gimnasio en la mañana, al almuerzo o al terminar el trabajo”.


Buenas vibras.

Otro relax de moda es el chocolate. El Ritual de Sensaciones que ofrece el Armonía del Balthus activa los sentidos partiendo con un tratamiento exfoliante con cera de abejas, algas, sales minerales y vitaminas, que hidratan, nutren y suavizan la piel. El cacao se encarga de humectar, tonificar y actúa como antioxidante. Luego una manta térmica  inunda con olor a chocolate. Para terminar un baño con mousse de leche. Para las que no pueden darse el lujo, el doctor Cruz recomienda “buscar un espacio con su pareja o marido y sin los niños. Ir al cine, tomar un trago y conversar para recuperar el espacio propio”.
Otra  alternativa es la Terapia Vibracional del Ramdas Rai, donde trabajan en base a los instrumentos tibetanos que poseen la frecuencia vibratoria del cuerpo humano sano, “por contener los siete metales básicos de la Tierra. Esto permite que una persona encuentre su equilibrio”, puntualiza Verónica Silva.


El poder del olfato.

Una buena forma de comenzar el día, asegura Verónica Silva, es sentir la respiración al despertar. “Para permitir una buena irrigación al cerebro se pueden hacer giros de cabeza bajo la ducha y rotar los hombros hacia adelante y atrás”. Son segundos en el baño, que dan energía al cuerpo.
El doctor Cruz insiste en que ínfimas acciones como prender una vela ayudan. “Uno conoce el mundo a través de los sentidos. El olor de un árbol te puede trasladar a la niñez y eso te relaja. Sucede también con una luz especial”.
Ambiente desestresante que cumple a la perfección la cromoterapia que ocupan en el Armonía del Balthus. María Paz González, coordinadora del área, explica que esta terapia “combate los males que alteran el funcionamiento físico. Los colores cambian tu estado de ánimo, te relajan, te dan energía y optimismo”.


Meditar donde sea.

Aunque no es parte de la cultura chilena, Verónica Silva cuenta que en el Centro Ramdas Rai cada vez son más las mujeres que se animan a practicar la meditación. “Meditar 11 minutos, sintiendo todo alrededor, basta. La repetición del mantra ‘yo soy’ te conecta con tu esencia y poder personal”, dice. De ese modo se ordena la energía y se consigue tener un día productivo. El doctor Cruz da un consejo: “Cuando una mujer está muy estresada hay una técnica que dice ‘póngase detrás suyo y vea cómo está, mírese’. Así podemos analizar si la carga que tenemos es la que debemos asumir. La diferencia está en decir ‘conozco lo que sé hacer y me gusta y lo puedo hacer bien, pero bajo estas exigencias no’. Es una perspectiva distinta”.

Sueño Sano.

Aquí los expertos coinciden en que se debe comer liviano antes de dormir. Verónica Silva recomienda el brócoli, las almendras, las pasas, los cítricos y el plátano (principalmente el raspado de la cáscara) para “elevar las vitaminas necesarias para calmar el sistema nervioso y liberar el estrés”.
A la dieta saludable el doctor Cruz suma otro factor: “Ojalá al menos un día a la semana apagar la tele temprano, de modo que a las diez estén durmiendo”.
¿Siestas? No más de 45 minutos. “El exceso de sueño corta el metabolismo y confunde la mente, se debe dormir lo justo y necesario. Ocho horas aproximadamente”, afirma Verónica Silva.


Viaje al interior.

Infalible. Viajar relaja. Pero ojo, se debe hacer con el ábaco en mano para no regresar con una deuda en la maleta. “Tener unas vacaciones en mente ayuda,  porque es una meta a corto plazo. Septiembre se puede aprovechar ya que salimos sin perdernos de la rutina del trabajo porque todos estamos en lo mismo”, dice el doctor Cruz. Y agrega: “En esta fecha una oportunidad es quedarse en Santiago y redescubrir lugares. Con toda razón hay mujeres que se quejan en las vacaciones, pues mantienen la rutina con los niños”.
Por la otra vereda, Verónica Silva invita a “una escapadita dentro de uno mismo para buscar la calma mental, que es mucho más fácil, barato y  reponedor. Sólo hay que concentrarse y buscar la respiración

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